La introducción a la contabilidad es fundamental para comprender cómo se registran, analizan e interpretan las transacciones financieras de una organización. La contabilidad se define como el proceso de identificar, medir y comunicar información económica de una entidad, lo que permite a los interesados tomar decisiones informadas.

En esta área, se utilizan principios y normas que guían la práctica contable, tales como el principio de entidad económica, que establece que las finanzas personales y las de la empresa deben mantenerse separadas. Asimismo, el principio de acumulación implica que se deben registrar las transacciones en el momento en que ocurren, independientemente de cuándo se realicen los pagos.

La contabilidad se divide en varias ramas, siendo las más comunes la contabilidad financiera, que se enfoca en la elaboración de estados financieros para usuarios externos, y la contabilidad de gestión, que proporciona información a los gerentes para la toma de decisiones internas.

Un aspecto clave en la contabilidad es el ciclo contable, que incluye la identificación de transacciones, el registro en libros contables, la elaboración de estados financieros y el cierre contable al final de un período. Este ciclo asegura que toda la información relevante sea recopilada y presentada de manera organizada y útil.

Finalmente, la contabilidad no solo se limita a la preparación de informes financieros, sino que también incluye el análisis de la salud financiera de la organización, la planificación fiscal y la auditoría, lo que la convierte en una herramienta esencial para la gestión empresaria y el cumplimiento normativo.